En la operación intervino el Servicio Marítimo de Huelva y el Servicio Aéreo, que logró interceptar la embarcación tras un seguimiento. Durante las detenciones, uno de los agentes fue agredido por uno de los narcotraficantes.

La Guardia Civil, dentro del marco de la lucha contra el narcotráfico, ha incautado 2.336 kilos de hachís que iban a ser introducidos en las costas onubenses. Se ha detenido a cuatro varones como presuntos autores de un delito contra la salud pública.

El operativo se inició tras tener conocimiento de la navegación de una embarcación semirrígida de las que habitualmente son usadas para el narcotráfico que se dirigía a la costa.

Inmediatamente se activaron las patrulleras del Servicio Marítimo de la Guardia Civil junto con el helicóptero del Servicio Aéreo, detectando a unas 11 millas de Isla Cristina, un bote con cuatro tripulantes que, al detectar la presencia de los agentes, intentaron escapar a gran velocidad.

Durante el intento de huida los agentes, con señales y gritos, instaban a los tripulantes de la embarcación semirrígida a que pararan motores, pero éstos hacían caso omiso, comenzando a lanzar al agua fardos de hachís.

Finalmente, los agentes lograron saltar al bote de los presuntos narcotraficantes reduciendo a los cuatros ocupantes, siendo agredido uno de los guardias durante el forcejeo que mantuvo con uno de los tripulantes que se resistía a ser detenido.

Mientras tanto, otra de las patrulleras logró recuperar del mar toda la droga arrojada durante el intento de huida y trasladarla a puerto.

Los detenidos y las diligencias han sido puestos a disposición de la autoridad judicial competente: Los 73 fardos de hachís incautados han quedado en custodia como prueba hasta su destrucción.