Cartaya se adapta a las nuevas restricciones. El Ayuntamiento intensifica la vigilancia policial para velar por el cumplimiento por parte de la ciudadanía de las nuevas limitaciones de movilidad y desplazamientos.

El Ayuntamiento de Cartaya ha destacado hoy la adaptación de la localidad a la nueva normativa andaluza frente al COVID-19 que entró en vigor en la tarde de ayer. Comercios y empresas no esenciales de la localidad echaron el cierre a las seis de la tarde, sin que se registraran incidencias, y espacios muy frecuentados del casco urbano, como la zona céntrica o la barriada de La Pila, registraron a partir de esa hora un importante descenso en el tránsito de ciudadanos y ciudadanas.

Desde el Ayuntamiento la alcaldesa, Pepa González Bayo, ha destacado “el importante esfuerzo que han realizado una vez más, los comerciantes y empresarios de la localidad por adaptarse rápidamente a la nueva situación”, puesto que la mayoría de los negocios de Cartaya, El Rompido y Nuevo Portil han apostado por la jornada ininterrumpida, sin cierre a la hora de almorzar, o por el adelanto del horario de apertura por la tarde, para aprovechar las horas de la sobremesa.

En este sentido, desde el Consistorio se ha animado a los cartayeros y cartayeras a acudir a los comercios también a estas horas, aunque sean menos habituales, y se ha realizado un llamamiento a los ciudadanos “para que realicen las compras navideñas en los establecimientos del municipio, y apoyar así entre todos a las familias de la localidad que viven de la actividad comercial y que se están viendo perjudicados por la crisis económica derivada de la pandemia”.

La alcaldesa ha pedido también la colaboración ciudadana en la adopción de las nuevas medidas, y especialmente de cara a las restricciones horarias y de movilidad decretadas por la Junta de Andalucía, “porque al virus sólo podemos derrotarlo desde la unidad de acción de todos”.

Para velar por su cumplimiento, el Área de Seguridad Ciudadana ha reforzado la vigilancia de la Policía Local en todo el término municipal, intensificando el patrullaje preventivo en las zonas más frecuentadas y los controles, especialmente en los accesos a los mismos.

De esta forma, pretendemos garantizar que “todos y todas nos sumamos al esfuerzo que está haciendo la sociedad cartayera para frenar la expansión del virus en nuestra localidad”.